Las Rozas conmemora el 85º aniversario de la muerte de la escultora Marga Gil Roësset

El Ayuntamiento de Las Rozas ultima el programa cultural con el que pretende homenajear a la pintora y escultora Marga Gil Roësset (1908-1932) en el 85º aniversario de su muerte. Durante el mes de mayo, se organizarán diversas actividades culturales, como exposiciones, charlas y conferencias, en las que se analizarán su trayectoria, obra y aportación artística.
El programa, diseñado por la Concejalía de Educación y Cultura, se inaugurará con dos actos institucionales en el Ayuntamiento: se le nombrará Hija Adoptiva del municipio y se pondrá su nombre a un edificio cultural de Las Rozas. Ambas iniciativas han salido adelante con la unanimidad de todos los grupos; la última, en el pleno del pasado mes de diciembre, a iniciativa de la concejal no adscrita Patricia Arenas.
Marga Gil Roësset destacó desde niña por sus excepcionales cualidades artísticas. En 1920, con sólo 12 años, ilustró su primer libro. Según los expertos, su trayectoria impresiona por el cambio de género artístico (del papel, la acuarela y la tinta, a la madera, la escayola y el granito) y estilo (del modernismo a la vanguardia) en un periodo de tiempo muy breve. Fue completamente autodidacta y su talento fue reconocido en su época por los críticos que la definían como “única, distinta, genial”.
La figura de Marga Gil Roësset aparece inevitablemente marcada por su temprana muerte, por voluntad propia, a los 24 años, y por su relación con Juan Ramón Jiménez, de quien se confesó enamorada y no correspondida, y Zenobia Camprubí.
Después de dejar una carta a Juan Ramón Jiménez confesando sus sentimientos, se quitó la vida de un tiro en Las Rozas, en el chalet de su tío Eugenio, El Torreón; un edificio del primer tercio del siglo XX y uno de los edificios con mayor valor histórico de Las Rozas. El 28 de julio del año 2010, el Ayuntamiento de Las Rozas colocó en ese mismo lugar una placa conmemorativa con motivo de 78 Aniversario de su muerte.
La obra conservada de Marga ha sido celebrada por su carácter precursor y por una originalidad que la equipara a las principales artistas europeas del período. Es considerada la primera escultora española en piedra y destaca su contribución a la Historia del Arte Español de la década de los años 20 y 30.