El alcalde de Las Rozas prueba el mayor simulador de caída libre de Europa

Siempre hemos soñado con volar. Un sueño que, con el paso del tiempo y el desarrollo de nuevas tecnologías, hoy por hoy, está al alcance de nuestra mano. ¡Y más para los roceños! Pues el mayor simulador de caída libre de Europa, Madrid Fly, está ubicado en Las Rozas. Una experiencia única de la que ha podido disfrutar el alcalde del municipio, José de la Uz, que este miércoles se acercó a visitar las instalaciones, situadas junto al polideportivo de Navalcarbón.
Es el primer túnel de viento desarrollado con tecnología española. Seis años y seis millones de euros para que la ingeniería KeelWit Technology y la constructora Edysa, ambas españolas, desarrollasen y patentasen su túnel. Un tubo de 4,6 metros de ancho y 18,5 metros de alto, ocho de ellos acristalados, en el que fluye aire suelto hacia el techo a velocidades de entre 180 y 300 km/h.
«Es una sensación muy difícil de explicar«, afirmaba de la Uz tras la experiencia. «Un proyecto innovador con tecnología 100% española; perfecto ejemplo de Marca España«. El regidor celebró el hecho de que, «una vez más, las empresas sigan eligiendo a Las Rozas para establecerse, fruto de las políticas económicas y empresariales del Gobierno municipal«.

La experiencia comienza con una breve explicación teórica sobre la postura que hay que adoptar dentro del túnel para mantener la estabilidad y sobre los gestos que han de utilizar los participantes para comunicarse. La velocidad a la que va el aire hace imposible hablar o gritar. Además, una de las mayores ventajas de los túneles de viento es que la experiencia se produce en un entorno controlado. Los instructores pueden sujetar a los participantes, corregir sus posturas o, incluso, sacarles del tubo con facilidad.
Los vuelos duran alrededor de un minuto y se compran por rondas. Dos sesiones cuestan 58 euros para un adulto y 39 para niños de a partir de cinco años. La regulación de la potencia del tubo y su seguridad lo hacen compatible para todos los públicos, exceptuando a mujeres embarazadas y a personas que sufran lesiones en hombros, cervicales y espalda.
Durante este primer año, la compañía estima la visita de 300.000 personas a sus instalaciones y un total de 50.000 voladores.
Más información en MadridFly.com.